Como muchos ya sabréis, el diseño exclusivo de Nuestra Señora del Pilar es una de nuestras creaciones favoritas. Adoramos romper con la monotonía y crear joyas únicas y diferentes, pero si además de todo esto la joya representa a la Virgen de nuestra preciosa ciudad, el resultado de la ecuación no puede ser mejor. Por ello, esta semana hemos querido acercaros un poco más  a su historia y compartir con vosotros los orígenes de nuestra niña bonita.

Los orígenes del diseño de la Virgen del Pilar de Monge

Para nosotros, al igual que para todos lo zaragozanos, la Virgen del Pilar es muy importante, ya que es el símbolo de nuestra ciudad y cultura. Por ello, queríamos rendirle un particular homenaje, creando una joya especial que reflejase la pasión que sienten los zaragozanos hacia ella y que a su vez su diseño fuera totalmente innovador, es decir, creando un diseño 100×100 Monge Joyeros.

 

Así pues, tras darle vueltas y vueltas, el primer esbozo nació en uno de los lugares más conocidos de la ciudad, el Tubo de Zaragoza. Tras tiempo buscando su conceptualización, fue en un bar de este emblemático barrio donde por fin dibujamos el primer boceto. Y es que ya se sabe, la inspiración llega siempre cuando menos te lo esperas.

 

Esta primera creación ya reflejaba las líneas puras y diseño actual que puede verse hoy en día en la Virgen del Pilar de Monge Joyeros. A partir de ahí, tras mucho mimo y tiempo, se crearon las diferentes piezas, cuidando cada terminación, material y acabado.

Finalmente, puesto que este diseño es único, está patentado y registrado, de modo que no existe una Virgen del Pilar igual a la nuestra.

Como veis, todas las grandes historias tienen un inicio, y esta semana hemos querido compartir con vosotros los orígenes de nuestra joya más preciada.

 

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